- Ramón Rodríguez Verdejo (San Fernando, 1968) no es un director deportivo cualquiera. Para muchos se trata del número uno del mundo. Este gaditano, discreto guardameta cuando joven, se ha transformado en referencia internacional tras inventar un modelo de negocio en el Sevilla FC que ha sido motivo de estudio por parte de universidades... y de espionaje (y admiración) por la de los clubes rivales. Tras diecisiete años al frente de los fichajes de la entidad rojiblanca, en la primavera de 2017 ha puesto el punto final a un brillantísimo ciclo coronado con una decena de títulos.
Continuó su carrera en la Roma, donde trabajó como director deportivo durante dos años. En 2019 rescindió su contrato con el equipo italiano para comenzar su segundo ciclo en el Sevilla.
Casado y padre de dos hijos, su otra gran pasión es el Carnaval de Cádiz, donde se ha desempeñado como chirigotero. Cuando no está firmando jugadores, celebrando victorias (o sufriendo por alguna derrota) es un tipo de lo más normal.
- Daniel Pinilla Gómez (Sevilla, 1974) es un tipo inclasificable, dicho en el mejor sentido del término. Dejémoslo en versátil. Durante dos décadas ha ejercido de notable periodista deportivo en los ratos libres que le han dejado sus incontables viajes. Es un misterio, incluso para él mismo, cómo ha logrado poner la banderita en los cinco continentes con base en una ingeniería financiera creativa y rotundamente efectiva. El resumen es: un presupuesto limitado no es excusa para quedarse en el sofá.
Persona polifacética, Pinilla ha tenido tiempo para inventar (y reinventar) su propia empresa de contenidos literarios, siempre con los viaje como denominador común. En alguna ocasión, él mismo ha admitido su sorpresa al saber que decenas de amigos han seguido al pie de la letra sus itinerarios y consejos. También se han subido al carro amigos de estos amigos, incluso puede que algún enemigo… si es que los hubiera, que no es el caso.
Con la publicación de Polifemo vive al Este dio el salto a un arte mayor y cumplió un sueño de juventud largamente deseado. De pluma ágil, pronta comprensión y vivaz ingenio, si hay un término para definirle, ése es el de reportero.